Valentina y Dña Ana


Atardece y poco a poco las estrellas le están ganando terreno al sol...Las despedidas siempre guardan un algo especial. Me gusta muchísimo esta hora de la tarde,... en la que  la luz se despide de un modo precioso, para dar paso a otro momento...la noche.

Y en estas horas intempestivas, en en las que parece que las luciérnagas hacen acto de presencia para hacer más llevadera la oscuridad, me he querido detener en unas personas muy importantes en mi vida. Como no creo que haya un día dedicado únicamente a las madres, sino que pueden serlo todos, ahí va...mi dedicación a ellas...a las mujeres excelentes que daban una versión diferente a las problemáticas que se les presentaba...

A pesar de no haberlo dicho aún por aquí, reconozco...soy fan de la serie "Llama a la comadrona" entre otros motivos, está el título que precede a la serie...


Mi abuela y mi madre, ambas dedicadas al cuidado....la primera como comadrona titulada en una época complicada para tener estudios y muy similar a la comadrona de la serie, salvo por lo de ir en bici. Cuando le cuento de qué va la serie y cómo van montadas en bicicleta, ella se echa a reí...
Mi abuela recorría las calles del pueblo en el que vivía, fuese la hora que fuese, para atender el lamento de una mujer partulienta. En una ocasión llegó a encontrarse con un niño que dieron por muerto y que luego revivió...
Ella estaba sola, más o menos...en ocasiones contaba con la ayuda del médico y/o el practicante del pueblo,...pero habitualmente...la acompañaban las mujeres que por allí habría...las vecinas, las hermanas o madre de la mujer que estuviera a punto de parir...
Ella recuerda sus trabajos más en soledad...

Mi madre,...otra gran mujer muy relacionada con le mundo de los cuidados...se dedicada a la diversidad y exigencia de todos ellos...,  desde ser enfermera fuera y dentro de casa, hasta ser decoradora de ambientes agradables, o refugio cuando las cosas no van bien, o economista "chicle"...de esas que saben sacar lo mejor cuando no hay nada y dar consistencia y seguridad...en fin...como imagino que son muchas de vuestras madres o incluso, personas excelentes, y escondidas para el mundo, pero que son todo un continente cuando estás con ellas.

Gracias a ella (y también a mi padre) soy amante de la lectura. Ella me inició en el mundo de los cuentos. Nunca me dijo "no" a aquellos cuentos que llamaban mi atención...e incluso, me regalaba libros de lectura veraniega. Ahora, ya no me regala tantos libros, pero me pregunta por ellos cuando quiere regalarme alguno...por si si los tengo,...todavía me dice..."¡¡este libro te encantaría, María!!"


Viendo la serie de la BBC no podía imaginar lo mucho que me acordaría de ellas....Muy curiosamente de mi madre y de mi abuela. Con mi abuela tengo más de una anécdota en sus visitas domiciliarias...pero las dejo para otro día...
Con mi madre, para quienes habéis visto la serie, se produce una serie de historias cotidianas, entremezcladas entre las residentes de la enfermería "nonatus"y las atenciones externas. Mi madre vivió un tiempo de una forma muy similar en el Madrid de los años 70, cuando aún no existía servidora.  Luego, durante años, íbamos a visitar a las que fueron compañeras de mi madre. Había una mezcla de enfermeras monjas y enfermeras seglares.


La serie te deja con muy buena sensación, tanta que no he podido evitar echar un ojo a los libros...espero poder terminar pronto los que tengo entre manos, para luego dedicárselo a la historia de Jennifer Worth.
También tengo la versión en inglés por aquello de animarme en la lengua en la que fue escrita y porque vienen fotos de aquélla época.

¿Qué conversación habrían mantenido Jennifer y mi abuela, Dña Ana? ¿Habrían hablado de qué medidas tomaban en determinadas situaciones cruciales? ¿Utilizarían el mismo tipo de material? 

Somos "pequeñas historias",...tal vez desdibujadas en el horizonte, queriendo ofrecer lo mejor de una misma...como hicieron y hacen estas dos excelentes personas...

Prometo que en la próxima entrada habrá libros...


Comentarios

  1. Me ha gustado mucho tu entrada y como has enlazado la historia de Llama a la comadrona con la de tu familia!! Las mujeres de tu casa también tienen una historia que contar y seguro que muy interesante. Me imagino tu conversación entre tu abuela y Jenny, tendrían millones de anécdotas que explicarse y cómo me gustaría a mí oírlas!! Y estoy segura de que el libro te encantará, es muy tierno y muy de verdad. Se nota que la protagonista amaba su profesión, que se preocupaba por sus pacientes que le importaban. Lo disfrutarás muchísimo! Besines

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    1. Gracias, Jane,...la verdad es que querría haberla escrito de otro modo, pero finalmente el resultado fue diferente...

      A mí también me encantaría escucharlas, a ellas, a las mujeres que ayudaban a que el milagro de la vida se realizara...con una taza de té por delante, jejeje...

      Un beso grande y espero empezar pronto a leer a estas comadronas tan interesantes...

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  2. ¡Qué post tan bonito y entrañable! Tu abuela debe de tener un montón de interesantísimas anécdotas que contar. Lo del niño que logró revivir... :-O

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    1. Masar...muchísimas gracias...Mi abuela tiene todo tipo de historias...ahora ya habla menos, pero sus relatos de antes, eran preciosos!!! Y había también historias más tristes...porque la vida,...es así...con sus altibajos.
      Bss!!

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  3. Wow me ha encantado la entrada! Saber un poco de tu familia y este genial momento en la historia de no hace mucho,
    Padrisimo :)

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    1. E.C. Belmont, dicen que las historias se olvida, o se cuentan de otro modo...o cuando aprendemos realmente,...ya nos estamos yendo...en fin...¿quién sabe?
      Gracias!!

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  4. Qué bonita crónica de tu madre y tu abuela, a mi también me encanta la serie, muy curiosa pa profesiómn en aquellos tiempos, qué mérito... Un beso!

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    1. Meg, gracias...una profesión espectacular para aquélla época.
      Un abrazo!!

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  5. Qué bonita entrada María!! Enhorabuena por tener esas mujeres excelentes en tu vida y formar parte de su historia.
    Yo también confieso que me gusta esa serie. Me resistía a verla, pero cada episodio me terminaba enganchando y me dejaba una sensación muy buena durante el resto de la tarde. Está muy cuidada y me parece positiva.
    Un abrazo.

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    1. Thornton,...a mí la serie me ha enganchado aún más en la segunda temporada...deja muy buena sensación. Veremos qué tal la tercera parte...
      De momento, está el libro...hay más...pero traducidos, tan solo uno de ellos. Habrá que tratar de darle tiempo...
      Saludos!!

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  6. ¡Que mujeres tan maravillosas las de tu casa! mi abuela también era comadrona y mi madre es ginecóloga (aunque dejó de ejercer cuando tuvo a 5 hijas en 5 años, vivía lejos de su familia y no había nadie que le ayudara con la crianza, y mi papá trabajaba 12 horas al día). ¡Y que bonita historia de que es ella quien te enseñó a amar los libros!
    Yo ya leí el primero de Worth y me encantó, por ahí tengo los dos siguientes en inglés, porque como tú, quiero leerla en el idioma original.
    Un beso,
    Ale.

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    1. La verdad es que si...son dos mujeres excelentes... y me gusta decírselo.
      Un beso gigante...y veo que tu familia también está llena de personas excelentes.

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  7. ¡Qué preciosa entrada, María! Destila cariño. Un gusto pasar por aquí, como siempre. Besos

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    1. Gracias Elvira...eres un amor. A mí me encanta leer las tuyas y sentir que estoy en un jardín donde todas las flores y paisajes imaginados,...tienen su lugar.
      Un abrazo grande!!

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  8. María precioso es quedarse corto. Que homenaje más bonito has hecho a esas mujeres excelentes que te han acompañado desde pequeñita. Estoy segura de que a Jenifer le hubiese encantado charlar con Doña Ana, hacerse confidencias acerca de ese duro pero precioso oficio. Y si te digo la verdad para mi habría sido un privilegio poder unirme a ellas.
    A tu madre y a todo un grupo de "mujeres excelentes" que en torno a tazas de té y de café confiesan experiencias y quizá algún que otro secreto.

    Todavía no he leído los libros de "Llama a una comadrona" pero con lo mucho que ha disfrutado Jane, dan ganas de devorarlos enseguida :)
    Un beso grande María y enhorabuena por la entrada.

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    1. Marie, la verdad es que son un grupo de mujeres excelentes, las que tenemos el gusto de conocer, verdad? Estoy convencida de que todas las personas gustan de sentir y vivir momentos similares, con personas de familia urbana o de la biológica...pero todos podemos encontrar a nuestro alrededor si miramos con ojos también de esperanza y comprensión a muchas personas excelentes.

      Me imagino a mi abuela hablando con Jane...seguro que coinciden en muchos pensamientos...
      Un abrazo grande y no olvido tus entradas, las he leído, creo que todas menos la última...pero no he podido escribir en ellas...llegará el momento con taza de té...of course.

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  9. Acabo de descubrir tu blog y en leer esta entrada casi se me salta la lagrimilla..me ha encantado :) Me gusta muchísimo la serie, igual que los libros que narran historias personales.
    Te sigo!!
    Un beso :)

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  10. Elena G. gracias por venir, y bienvenida...a mí también me gustan las biografías y también aquellas historias que llevan algo del autor, aunque esté rodeada de ficción...
    Un beso!! (Siento mucho haberte escrito tan tarde)

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