Amberes y Loreenna Mckennitt

Amberes es una ciudad preciosa...siempre que voy encuentro algo distinto que me llama especialmente la atención. Me parece de lo más familiar. No sé si es por la plaza, por sus tranvías, por las mesas dispuestas para hacer un alto en el camino...no lo sé...solo puedo decir que nunca me defrauda.

Tampoco sus librerías...que también están aunque a veces parece que juegan al escondite tras las tiendas y calles más comerciales. Ellas, aquí se esconden (o al menos a mí me lo pareció) en rincones menos llamativos, por así decirlo. De todos modos, en esta visita a la ciudad... fueron encuentros casuales, porque no era el motivo de mi llegada a la ciudad. Aún así me "desperte" mientras caminaba en " 'tstad leest" y estuve mirando algún que otro libro. En esta ocasión no me llevé ninguno. La mayoría estaban escritos en neerlandés. Otro impedimento era el tamaño de la maleta no podía crecer...ya había hecho los excesos necesarios en Bruselas.

El gran motivo de la visita a Amberes era encontrarme con Loreena Mckennitt...y lo que no sabía, es que ella nos esperaba en un bosque precioso...a las afueras de ciudad. Desde luego, en mi próxima visita a la ciudad, será una de las visitas elegidas...Es un lugar precioso,...no me imaginaba que nos fuera a gustar tanto.

Las palabras se quedan cortas para transmitiros la voz de Loreena...es muchísimo mejor en directo. Llegamos más o menos justos antes del atardecer...en un día excesivamente caluroso, y con pronostico de un 80% de lluvía. Todas las personas que acercaban al recinto dentro de un lugar que parecía sacado de un cuento. Tuvimos que andar un rato hasta llegar al escenario.



El Rivierenhof visto desde arriba

 Me gustó muchísimo...todo...ya no solo verla a ella cantar en directo, sino el equipo de música con el que trabaja. Todos son estupendos con su instrumento en particular. Aunque destacaba un violín...

Miraba a mi alrededor, antes de comenzar el concierto...y me dejaba asombrar por las altas copas de los árboles...que sin saberlo serían también, invitados especiales para escuchar la música que elabora Loreena.  También era curioso mirar a  las personas que acudian al concierto. Venían con una especie de mochila-picnic en la que no podía faltar un paraguas....(dadas las previsiones metereológicas)...no había duda de la inminente posibilidad de lluvía.

Fue impresionante, porque finalmente no llovíó e incluso refrescó un poco...lo justo para echarse algo sobre los hombros.



Mercado de San Lorenzo
en Toronto, Canadá



Loreena me ha acompañado en muchos momentos de mi vida. Ya desde cuando era estudiante, hasta la actualidad. La conocí por casualidad...y sin pensar que me fuera a gustar. Pero siempre es bueno estar abiertos a nuevas posibilidades y así fue como nos conocimos.

Ella se hizo más conocida poco a poco...ya en Canadá en Toronto, tocaba canciones en el antiguo Mercado de San Lorenzo...y vendía ella misma los cds.

Parece que aquí es típico tomar patatas en muchos momentos y casí a cualquier hora del día. Y este momento no lo iba a ser menos... Así que añadimos a nuestras patatas  una copa de algo similar a la sidra, que servían durante el descanso...era sensacional estar allí con las copas de plástico en la mano, el chal por encima y la buenísima compañía de Lorenna. Me sentía distinta, como hechizada.

Se la ve, aparentemente, como una mujer muy sencilla, que mira a quienes la vamos a escuchar su música, su voz...que hasta se quedó un instante en silencio sólo para decirnos que era una maravilla poder observar nuestros rostros....

El recinto no es demasiado grande, pero tampoco pequeño, y como aún no había atardecido, podía ver perfectamente nuestras caras...

La noche fue avanzando, mientras su música y su voz seguia con nostros. El concierto duró casí dos horas y media. Y se salió dos veces más a tocar...después se iba rumbo a Cambridge.

No pude verla, ni saludarla...me habría quedado al final del todo,...con la esperanza de hablar un poco con ella, ... pero perdíamos el tranvía,...que finalmente también acabamos perdiendo a pesar de todo.
Afortunadamente, todo se solucionó con un buen paseo nocturno por calles de lo menos recomendables, donde hasta una chica se arrimó a nosotros para sentirse más resguardada.
Conseguimos, aún no sé cómo,...llegar a la estación de tren, y tomamos un tren que en principio y en algunos paneles de la estación aparecía como inexistente... el de las 24:02...El siguiente tren, ya era demasiado tarde para nosotros... era a las cinco de la mañana... Fue una noche mágica....

Sigo leyendo...los libros siempre son un precioso refugio para diferentes épocas de la vida. En ellos puedes viajar, soñar, mirar las letras como se balancean hasta construir palabras...ellos están ahí, esperando a ser descubiertos...