Siempre en la memoria

Creo que nunca acabaría de contar pequeños momentos de este mágico viaje. Pero eso pasa con todos. Viendo lo mucho que me estoy extendiendo, dejo aquí unas fotos y resumo (quizá me repita de nuevo) lo que ha sido estar en esta gran ciudad.

Esta mañana, al entrar en el trabajo, me han dicho que Istambul está inundado...de repente, las imágenes se han ido agolpando en mi mente, y no daban paso más que al "Cuerno de Oro", la Torre Gálata, las barcas y sus varqueros...El Bósforo...Las Mezquitas.

Uno de los días del viaje, lo dedicamos especialmente a las Mezquitas. Es sobrecogedor, entrar en una de ellas, casi siempre hay alguien haciendo oración. En el espacio reservado a las mujeres también. Nosotros como turistas (y por su puesto, las mujeres, ibamos tapadas con un pañuelo. Hay una persona que observa que te descalces lo más cerca de las alfombras, para no pisar el suelo* impuro y que te pongas el velo/pasmina/pañuelo..., no son estrictos en que se te vea o no el pelo...al menos en los barrios más turísticos)

Pero lo impresionante, es pasar a la Mezquita y escuchar la llamada a la oración. Ver una oración completa, los movimientos del cuerpo para orar, los cánticos, "el Iman" (creo que se dice así) llevando la oración. Todos al unísono. El ritual es de gran belleza y sobrecoge.

Otro momento maravilloso fue recorrer el Bósforo al anochecer...bailar al lado del mar en la parte asiática, al ritmo de nuevas músicas turcas, releer entre las piedras la historia de una ciudad que cambió de nombre,...en fin...un viaje de los que vuelves diferente, e incluso te sientes distinta.

Encontré un libro que traje conmigo de Mary Wortley Montagu, su marido fue enviado a Istambul como embajador, y ella le acompañó. Sus cartas son muy significativas y transmiten la vida de aquella ciudad en el s. XVIII "Life on Golden Horn"** (Cuando me atreva a leerlo en Inglés...poco a poco os cuento más cosas que me llamen la atención. Para empezar sé que fue de las pocas mujeres que llegó a entrar en un harén, y quedó cautivada con las mujeres y su forma de pensar. Realmente las veía más libres que a la vida de las mujeres británicas).

"Alejarse volando de la colmena, igual que las abejas, y volver cargados con la dulzura del viaje, escenas que cautivaron la mirada, aventuras apasionantes que avivan la imaginación, conocimiento para iluminar y liberar la mente de los prejuicios que se aferran a ella y la embotan, un círulo más amplio de solidaridad con nuestros semejantes; estas son las ventajas del viaje, y estoy convencida de que nos hace mejores y más felices" (Mary Shelley)

*Esto me llama mucho la atención. Sé que lo hacen a modo de ritual, y muchos hombres antes de pasar a la oración se los lavan y puede que venga de antiguas normas, pero me resulta curioso que en varios paises orientas, no pisar la casa con los zapatos de la calle; en China, Japón...

** Encontré una librería británica en la calle principal: Istiklal Cadessi, la librería se llama "Robison Crusoe 389". Esta desde 1994. También adquirí "A vindication of the rights of woman" de Mary Wollstonecraft (lo tengo en castellano, pero lo quería desde hace tiempo, en inglés...para ir viendo...jeje)