Bluestokings -Jane Robinson- y Oxford

Lo adquirí mientras esperabamos el tren para ir Oxford, en la estación de Paddintong. Dentro también hay librerías, con ofertas de 3x2...de las que no puedes evitar salir con esos tres libros que desean que compres...en fin...allí estaba,...este libro... mirandome cara a cara...con esa portada también de Oxford y esas primeras mujeres  que accedían a la educación universitaria. Porque, este precioso libro,  trata de eso...de aquellas mujeres que decidieron luchar por tener un lugar entre las butacas de la universidad. En la contraportada, explica brevemente, como Jane Robinson, la escritora, se entrega a una investigación sobre los sacrificios, luchas, prejuicios, amistades,...todo lo que llegan a encontrarse las mujeres de aquella época de finales del siglo diecinueve que desean ser admitidas en las diversas universidades de la región.

El libro viene acompañado de fotos, ilustraciones de la época,..un indice cronológico sobre la historia educativa de las mujeres, notas, indice bibliográfico...es muy completo y en los ratos que lo he leído y ojeado...no creo que vaya a decepcionarme. De momento sólo os lo presento, porque aún no creo que vaya a leerlo de un tirón.

Me gusta ir presentadon un libro (de esos que me compré y dejó mi cuenta tiritando...) y mientras, acercarme a la ciudad de la que parece hablarme...y sin duda...este libro me lleva a Oxford.

No es la primera vez que visito esta cidudad, pero sí es la primera vez en la que soy consciente, al ir a visitarla,  de las necesidades educativas igualitarias para todo el que desee aprender. Oxford es una ciudad que siempre me ha gustado mucho...Perderme por entre su calles empedradas, seguir a un fellow e integrarme dentro de un college (como Merton) respirar el ambiente de las letras,  librerías, pubs...y siempre intentando no ser atropellada por alguna bicicleta...Esta vez, con mi libro en la mano y unas cuantas postales para enviar...

La verdad es que una de las cosas que más me gusta de Oxford y donde nunca he entrado, es la biblioteca y el edificio Radcliffe...es  un icono inconfundible de la ciudad. Pero, no dejan entrar a no ser que seas estudiante. Una lástima, porque querría haber visto algún libro de Tolkien, o sentarme simplemente a leer mi libro entre alguna de sus sillas.

Iba acompañada por amantes de la literatura fantástica (y he decir, que en este caso...también yo era una de ellas) así que no quedó otra, que dejarnos caer por The Eagle and Child, el lugar donde Tolkien, C.S. Lewis,...en definitiva los "Inklings" se reunian para charlar sobre ese mundo mágico que llevaban a cuestas...que creo que les ayudó de  algún modo a superar esas dos grandes guerras que tuvieron que sufrir, con toda la carga emocional que vivir esa experiencia  conlleva. 

Pasee por algunos de los rincones favoritos de Tolkien. Visité el  Oratorio donde solía hacer oración, o el juzgado donde C.S.Lewis se casó con Joy (la primera vez, para ayudarla con los papeles de residencia...).  Y algunas de las que fueron sus residencias.

Mientras estaba sentada en la Rabbit Room de Eagle and Child tomando té,  Earlgrey ( y mirando sus paredes, pensaba...sí estas pudieran hablar,...si dejase que ellas nos devolvieran las imágenes de aquellos hombres con sus pintas de cerveza entre manos... cuantos cuentos, historias, realidades, fantasías...serían capaces de contar!!!

Alicia y su país de las maravillas, también tiene su rincón...al pasar por su tienda,  no pude evitar sonreir al ver la cantidad de cosas distintas que había...te venden manteles con dibujos de Alicia, libros, postales, golosinas (las de la época de Alicia), cucharas...Vamos de todo. Se me ocurrió preguntar al señor que vendía los productos si esa era la tienda autentica, y él ni corto ni perezoso, extendió su brazo para dejarme ver una interesante postal/foto de la época. Y en efecto...allí ves la misma tienda que en la actualidad.  Por lo visto es donde Alice Liddell (la niña "Alicia") se atiborraba de golosinas.

El libro, esta escrito en inglés, y me acompañó la hora de trayecto hasta Oxford. Por supuesto, no me lo he terminado y sólo ha estado entre mis manos en contadas ocasiones.
Las fotos son de este año y tomadas por una servidora.