Un cine, por favor (I)

Hace mucho que no escribo sobre ir al cine...y he visto unas cuantas películas...aunque no tantas como otros años. He hecho una selección aunque aún quedan muchas por nombrar, y que ya están saliendo en dvd.
La verdad es que últimamente dedico más tiempo a ver películas en casa...incluso a ver algunas que ya he visto millones de veces. Creo que cuando hay cambios, es agradable ver aquello que sabes como empieza y termina,...resulta muy reconfortante.

En fin...empezaré por una que me ha gustado muchísimo...y a la que posteriormente, la he acompañado leyéndome el libro...
Amor bajo el espino blanco,...con ella terminas por creer en el Amor Eterno,...en caso de que no creyeras que existe.

Encontrar un alma gemela de ese calibre, con esa entrega y pureza... es difícil de ver por el mundo. El director, Zhang Yiou, esta vez, ha querido ser más íntimista que con otras películas, como "La casa de las dagas voladoras" o "Camino a Casa", una de mis favoritas...
He de decir que el libro está bien, pero la película...es preciosa. El amor entre dos personas puede ser de muchas maneras, pero esa experiencia en la que no puedes pasar ni un minuto sin verla,...ese amor, bien vivido, sin llegar a la obsesión...es maravilloso...
Además, hay que añadir que no es un amor egoista...de hecho, quiere dejar que vuele...que sea ella misma,...tan sólo quiere cuidarla, mirarla y quedarse con ella...en fin...mejor verlo, porque contado no es lo mismo. Tampoco hay que imaginarse que es una historia empalagosa, porque dista mucho de ser algo así...es sencilla, agradable, sin pretensiones...y nada que ver con las películas románticas que nos ofrecen desde el otro lado del atlántico y que no dudo que también pueden estar bien en ocasiones, pero no se le parece.

La historia, se dice, que en cierta medida, es verídica. Se desarrolla en un escenario oprimido. Estamos en los años setenta, donde la vida dictatorial  suprime cualquier rasgo de identidad propia, te anula, quiere controlarte...desea saber en todo momento lo que haces...da igual qué política  siga...es una vida opresora, donde no hay rincones para vivir con sencillez los momentos que se van desarrollando en la vida. Todo es público....y todo se sabe. No hay lugar para la intimidad.
Bajo esta puesta en escena, nuestros protagonistas, sobreviven gracias a pequeños gestos de amor. Estos se suceden a lo largo de varios años...y su amor se hace aún más fuerte a pesar de la adversidad.
La música, el paisaje...los detalles...la fotografía, las miradas...son los que realmente hacen que esta película se meta dentro de una misma. Quienes fuimos, tuvimos que sacar el pañuelo en varias ocasiones. Es bonita y a la vez triste. Y te deja buena sensación...

Otra que me ha gustado muchísimo ha sido "La Delicadeza"...de ella os puedo hablar poco sin desvelar algunas sorpresas de la película. Es casí mejor no saber nada, y deslizarse en la butaca del cine, quedarse quieta...y esperar a que comience...poco a poco, se irá desarrollando una historia que se parece mucho a lo que puede sucedernos en la vida, en nuestro círculo...las despedidas de los seres queridos, los duelos, esos nuevos encuentros... los miedos que tenemos a lo desconocido y lo diferentes que son los momentos que vivimos...Explica de forma maravillosa  eso que se piensa...parece que vivo varias vidas en una sola...

Personalmente me dejó muy buena sensación y Audrey  Tautou está formidable. Pero el personaje que más me gustó es uno que parece inadvertido...incluso en principio para la cámara.

Es muy muy agradable. Sencillamente, compruebas que puede ser, que las personas que tenemos a nuestro alrededor y no solemos levantar la mirada para verlas, proporcionan, la misma sensación que esa mantita agradable que nos arropa cuando estamos agusto leyendo, o viendo la tv, o relajandonos un poco...

Bueno, todo esto me sugiere la película...lo mismo para otros ojos y oídos es menos...pero me fui contenta de la sala de cine, con una sensación muy bonita.

Y de aquí, me voy a Brave,...una película preciosa...donde el sentido del humor, mezclado con música celta, y el interesante guión,.. ofrecen una visión muy particular sobre la vida de una chica que quiere cambiar su destino...o aquello para lo que la han dicho que ha nacido.
Es muy bueno ver la relación entre madre e hija. Esos momentos en los que ambas aprenden la una de la otra y el orgullo, la vanidad,...se entierran...
Me gustó más de lo que imaginaba...y os puedo asegurar que salí con unas ganas tremendas de estudiar tiro con arco...y aún no  descarto aprender algún día.

Y bueno...¡¡cómo no!!....fui a ver a Woody Allen en su "A Roma con Amor"...no sé...no es la que más me ha gustado, ni  la que menos. Por su puesto hay mucho de él en la película, y me entusiasman sus guiones...las ideas que tiene...la forma que ofrece al espectador de informarnos sobre lo fácil y engañoso que es el ser humano y lo muy manipulables que somos, a veces...explica a las mil maravillas, como nos dejamos embaucar por la fama, el dinero, la posición social...
Esta película trata de todas estas cosas y muchas más.

Hay especiales momentos de humor, y algún que otro diálogo fresco, dinámico...tipo Allen...pero he de decir que me ha resultado un poco pesada. Además de observar con más nitidez, que los actores que trabajan con él se moldean a su gusto...de algún modo, son él. Supongo que es algo peculiar en sus películas...y por eso en ocasiones, nos gustan tanto.

Sigo leyendo a las mujeres en bicicleta...pero leo con mucha lentitud. Los cambios en mi vida se aproximan,...Esos momentos de transición siempre son difíciles, y más cuando no apetecen, pero bueno...de todo se puede aprender y sacar algo bueno. Las experiencias están para vivirlas y sacar de ellas el mejor de los provechos.

Os dejo algo cardiaca, porque no he parado de tomar té, mientras escribía. Esta vez, un clásico en casa, té de Toffee...seria capaz de beberme la tetera entera, pero me contengo.
Quizá tarde un poco en escribir y en pasarme por los blogs, ciertamente, este año, está siendo bastante agitado...