Nieve en Abril
Hace unos años, bueno, quizá muchos años...leí un libro que llevaba este título..."Nieve en Abril" Aún reposa en las estanterías de la casa de mis padres...o bajo tierra...(mi madre, al ver que no iba nunca a llevarme mis cosas, decidió el pasado verano, enterrarlas....pero ésto merece una entrada a parte).
Del libro... apenas recuerdo bien el argumento...pero sé que con él viajaba a Inglaterra y con la protagonista que quería llegar a Escocia...pero no puede ser por la nieve. Y de ahí surge una trama interesante.Es de Rosamunde Pilcher. Ésta autora (o autores, hoy en día dudo de que fuera ella sóla quien me llevara a una nevada en Abril) me hizo viajar a Inglaterra en varias ocasiones durante mi adolescencia. Todos sus personajes tienen dinero y sí no lo tienen, se convertirán en personas ricas porque recibirán algún tipo de herencia, o venderán un cuadro que les hará famosos, etc...Se reconciliarán con quienes creían que no sería posible ningún tipo de acercamiento y vivirán alguna que otra aventura amorosa...
Creo que aunque, a veces me pregunto porqué leí aquellos libros,...luego me consuelo pensando que todos tenemos un pasado inconfesable...y queramos o no todos esos libros forman parte de esa biblioteca interior que inconscientemente nos lleva a descubrir otros libros.
Reconozco que de ésta autora no me quedé en un solo libro. Creo que leí casí todos...unos son mejores que otros. De los que acompañaron mis tardes veraniegas adolescentes, me quedo con Septiembre. No sé si fue porque lo leí en un viaje por Jerte (y el paísaje me recordaba bastante a lo que describía la escritora) o porque es un mes que me gusta mucho y mi insconsciente me traiciona...no lo sé...el caso es que guardo buenos recuerdos de su lectura, a pesar de haber olvidado la trama.
La memoria es selectiva..."nieve en abril" vino a mí cuando las noticias de éstos últimos días no han hecho más que recordarnos lo atípico que es ver nevar en el mes que nos acaba de abandonar.
Y de ahí...mi mente siguió viajando, ¿por qué no? Y lo hizo recorriendo esos otros libros que leía cuando empezaba a ir al instituto. Y algunos de ellos, son de los que me taparía los ojos con una banda negra...pero en fin...es lo que ocurre...que una no es siempre la misma persona.
Pero también hubo libros con los que aún recuerdo buenos momentos, como "Mi planta de naranja-lima". Lo leí en una noche...y lo releí más tarde. Leyendo la vida de un niño, descubrí que no podía dar la espalda a las injusticias del mundo.
Muchos de éstos libros siento que definieron parte de esos caminos que escoges cuando estas estudiando y que aún te preguntas por qué.
Creo recordar que guardaba fichas sobre los libros que leía y las película que iba viendo...
Nuestras mentes se van forjando de las experiencias que vivimos y que leemos, y de esa forma construimos pensamientos. Esos que nos llevan a formar parte de los que somos o queremos ser.
Tengo que echar un vistazo más profundo a esos libros que "abandoné" en casa de mis padres...puede que me ría un rato descubriendo las lecturas que anidaban, por entonces, las estanterías de mi mente...de algunos, seguro, que ni me acuerdo, pero merece la pena intentarlo.
Es curioso cómo vamos cambiando como lectores al mismo tiempo que evolucionamos como persona. A mí también me ha pasado que me encantara algún libro y que tras una relectura muchos años después me pareciese horrible, pero también lo contrario, y eso sí que es una sorpresa agradable.
ResponderEliminar¡Besos!
Es cierto...cambiamos en algunos libros, como bien dices, otros que pensábamos que serían horrorosos, ahora nos gustan.
EliminarEs lo bonito de la vida...los libros van formando parte de nuestro bagaje.
Un besin!!
Esos libros que ahora crees horrorosos, en su momento fomentaron tu lectura, mantuvieron tu interés por los libros que con los años han ido cambiando de gusto.
ResponderEliminarYo perdí mi gusto por la lectura en el instituto y no lo recuperé hasta pasados los 30... no sabes lo triste que es pensar que he perdido todos esos años de lecturas y libros!
Por cierto, Mi planta de naranja y lima lo leí el año pasado. Me lo recomendó un librero muy exótico de mi ciudad y me encantó
A nosotros el domingo también nos nevó.
Besos!
Guacimara...yo de alguno sí que me arrepiento...pero son los menos. Y no los he nombrado en la entrada. Rosemunde Pilcher no entra en esos libros con los que sentí que perdía el tiempo.
EliminarHay que reconocer que hay libros malos, y con todos los buenos que existen...mejor no perder el tiempo, verdad?? Ahora, los suelo dejar, pero entonces era impensable.
L.Maud Montgomery, en su diario, y en nuestra edad, cuando vuelve a sus libros de adolescente, dice que cómo llegó a leer tal libro...además...ella cuando los leía en aquella época, no decía simplemente que le gustaba una determinada lectura...las alabanzas que dispensaba eran siempre muy elaboradas, por lo que cuando se releía, y luego volvía a leer el libro, entendía que eran para ese momento. También de alguno se arrepintió, pero esa era otra historia.
Yo no soy una lectora voraz, por lo que me pierdo muchas lecturas...el tiempo siempre es relativo.
Mi planta de naranja lima es una delicia. Creo que todo el mundo debería leerlo alguna vez en la vida. Despierta conciencias, verdad??
Aquí vimos que el coche estaba nevado el lunes...pero es que ahora vivo un poquito más alto...en la ciudad no nevó.
Un beso grande y feliz noche!!
Yo "Mi planta naranja lima" lo leí siendo muy niño, cuando iba al colegio, y me emocionó bastante.
ResponderEliminarHay libros y géneros que hoy he perdido el gustillo por leer, pero aunque ya no me gusten tanto, les guardo cariño porque fueron parte de una etapa como lector.
Desde luego...todos los libros forman parte de nosotros...de lo que fuimos...y en parte de lo que somos. Pero...no cabe duda que los gustos también cambian, y que a pesar del tiempo, hay libros que no habrían causado demasiado vacío sí no los hubieramos leído. O por lo menos esa es mi experiencia.
EliminarSaludos!!
No me arrepiento de ninguna lectura que hice, a pesar que algunas dejan mucho que desear o que parecen no haber enseñado nada, todas nos van marcando como personas y diseñándonos como lectores.
ResponderEliminarBesos
De ninguna lectura?? Pues me alegro...quizá fuiste muy selectiva. Yo de alguna sí que pienso que me la podría haber ahorrado. Como digo más arriba las hay que no dejan ni luces ni sombras...pasan tan indiferentes por nosotros que caen en el olvido. Otras, a pesar de que pertenezcan a una época y que ahora no dedicaríamos tiempo a leerla, son de las que hablas...de las que nos marcan como personas y nos definen.
EliminarUn beso!!
Hola María!
ResponderEliminarAy, llevo un ratito pensando y no se me ocurre ninguna lectura así vergonzosa de mi época de juventud. Seguro que habrá y muchas, pero no lo recuerdo.
Pero bueno, hay una peor y no fue hace tanto tiempo jaja Crepúsculo, que leí los tres últimos (el primero vi la peli). Creo que me da vergüenza reconocerlo, pero los leí y algunas partes, sobre todo del segundo, me gustaron. Luego ya le cogí tirria a los protagonistas y terminé la saga con la única esperanza de que la Meyer fuera original y se los cargara.
Yo voy a seguir pensando (porque además me has dejado dándole vueltas sin poder parar) en libros de aquella época, a ver qué lindezas pasaron por mis manos. Si me acuerdo, vuelvo y te cuento.
Un beso muy fuerte!
Mª José, yo también voy dandole vueltas a lecturas vergonzosas...recnozco que me acuerdo de algunas, pero tendré que acercarme a casa de mis padres para "desenterrar" algunas que me hicieron sentir verguenza ajena. De la que más me acuerdo fue de un libro de bailarinas que leí con una amiga y que te subía los colores...pero fui incapaz de dejarlo...
EliminarLos de crepúsculo, no pasa nada...reconozco que tienen que tener algo, aunque aún no he caído en la tentación vampírica...yo hay libros que leo que no confieso...jajaja...todos tenemos nuestro lado oscuro...quizá algún día lo cuente.
Un beso grande y no lo pienses mucho...tal vez fueron compañeros ligeros y pasaron sin pena ni gloria por tu mente.
Yo creo que he pasado por todo tipo de etapas lectoras. Algo he leído de Pilcher y de muchos otros autores que actualmente no me aportarían nada, pero una vez olvidadas las historias si me queda la sensación reconfortante de que en su día esas historias me parecían preciosas y escritas especialmente para mí.
ResponderEliminarEl gusto por la lectura cuando permanece tiene que ir evolucionando y creciendo y creo que todo es bienvenido cuando te lleva a seguir leyendo.
Un saludo.
Desde luego pasamos por muchas etapas en nuestra vida de lectura...y en su día pueden ser estupendas, pero con la mirada prudencial y la distancia adecuada, algunas de esas lecturas ahora nos parecen muy lejanas...y no me refiero a Pilcher...tengo otras lecturas inconfesables...
EliminarPero creo que leer por leer no es suficiente motivo para seguir leyendo...creo que las lecturas nos tienen que aportar algo más que el simple hecho de leer.
Un beso!!
Hola. Yo también releí (algo raro en mí, de los pocos libros que he releído) "Mi planta de naranja-lima". Su lectura la primera vez me marcó bastante. Yo de joven leía mucho a Stephen King y Vázquez Figueroa y ahora no puedo con ellos, no sé porqué, ya que son buens autores. Vamos evolucionando como personas y como lectoras.
ResponderEliminarBesotes María
Marian, la verdad es que mi planta de naranja-lima es mucho más que una lectura. Es la vida de los niños...y sientes que es extremadamente real.
EliminarNo he leído nada de Stephen King, pero no creo que sean lecturas para avengorzarse...seguro que se rescata algo...es cierto lo que dices...vamos evolucionando...pero también es verdad, que hay lecturas malas...que no nos hacen avanzar y nos llevan a otros libros mejores. Estoy convencida que los que nombras, no son el caso.
Qué bonito es viajar con los libros!! Ellos nos van llevando de un rincón a otro de nuestra vida.
Besos grandes Marian
La de libros que tengo leídos de Rosamund Pilcher!!! el que más recuerdo es uno que se llamaba 'El regreso' y que me enganchó muchísimo! y también 'Los buscadores de conchas'! me pasa como a ti que no recuerdo bien todos los detalles de la trama pero me queda el recuerdo de pasármelo bien leyendo y es que es verdad va por épocas que a uno le apetece leer una u otra cosa.
ResponderEliminarY una cosa más... ¡tienes que ir a casa de tus padres y recuperar tus cosas! que seguro que hay cosas que ya incluso olvidaste y que son geniales. Además los padres tienen un peligro cuando se ponen a limpiar...ja ja ja
Jane Austen...qué alegría no ser la única que leyó a Pilcher!! Hay que reconocer que tiene alguno mejor que otro...No leí ninguno de los dices...pero la sensación de llevarme a Inglaterra esa sigue persistiendo...
EliminarAy!! Lo de mi madre es muy interesante...sí tengo que ir a casa de ellos y tratar de recuperar libros, notas, cuadernos...Llevo dejandolo pasar mucho tiempo.
Un beso grande!!
No he leido ninguno de los dos, pero no los descarto, el de la nieve no lo conocía, tiene buena pinta, investigaré...Un beso!
ResponderEliminarMeg, no sé...depende del momento...quizá como lectura veraniega tiene su punto. El de nieve en abril no es de los mejores, pero bueno...
EliminarUn beso enorme!!
Querida María, nunca he leído a esta autora, Rosamund Pilcher, pero he leído a otras y otros que como dices forman parte de nuestro pasado y que aunque llenas de tópicos hemos disfrutado también...y mucho en más de una ocasión. Quién no quiere de vez en cuando creer en los cuentos de hadas o en los milagros. Estas novelas cumplen su función y están muy bien. Yo leí muchas de Agatha Christie y aunque ya no leo nada de ella me es muy grato recordar lo feliz que me hacían. Me las leía en una noche!! También cuando no tenía nada para leer leía las de Corín Tellado de mi madre y hermana, ya te lo conté una vez. Estas he de reconocer que eran por pura necesidad y creo que no me dejaron apenas poso. Las de Agatha Christie en cambio me dieron mi gusto por lo inglés. De ellas me quedó la costumbre del té con leche, de las pastitas a media tarde y de envolverme con la melancolía londinense de los días de lluvia y por ellas descubrí a Shakespeare. Todos los lectores tenemos un pasado inconfesable, como dices, y es maravilloso que así sea, pues han conformado el tipo de lectores que somos hoy. A mí tú me pareces una lectora encantadora, culta y elegante, por lo que esos libros olvidados casi, en estanterías sueltas u dejados atrás en casa de nuestros padres forman parte inseparable de nuestro árbol de habichuelas mágicas.
ResponderEliminarEncantadora entrada como siempre María. Gracias siempre por unos instantes de deleite literario!!
Besos!!
Querida Minomalice, desde luego hay libros que quizá no volveríamos a leer hoy en día, pero que han armonizado perfectamente en nuestro pasado...de algunos no nos arrepentimos, a pesar de que no formen parte actualmente de nuestras futuras lecturas...
EliminarLos libros que nombras, no son para avergonzarse...Agatha Christie debió de ser una lectura muy agradable....siempre rodeadas de té y con vidas aparentemente apacibles...Pero hay algún libro de esos que una dice...¡¡pero cómo podía leer eso y gustarme!! Al menos en mi bagaje de vida lectora existe alguno con ese calificativo...no lo puedo negar. Otra cosa es que me atreva a confesarlo. Aquí soy un poco cobarde. Me atrevo con Pilcher porque del todo...no me arrepentí cuando lo leía...y como bien dices...me llevó a otros libros.
No soy muy culta, Minomalice...y mi aficción a la lectura fue tardía. Cuando te he leído recordé a Helene Hanff...los de la librería del 84 también la imaginaban así...gracias...
Me ha encantado eso de las habichuelas mágicas, haciendo referencia a los libros que vamos dejando atrás...tienes mucha razón...es una preciosa metafora.
Espero que ambas sigamos leyendo mucho...y que unos libros nos lleven a otros...
Un beso muy muy grande!!
María:
ResponderEliminarencantadora entrada ¡como siempre!
aún tengo libros en casa de mis papás y eso que he cumplido este año XX de casada ;)
no puedo creer que los hayan enterrado ¿de verdad? ¿o están almacenados en algún sótano?
Las lecturas de mi niñez desarrollaron mi imaginación, me dieron consuelo y compañía cuando los necesité y fueron formando mi afición a la lectura. Creo que no lamento ninguno.
Eso si, con la edad me he vuelto más exigente y si un libro no me está gustando, lo dejo sin ningún remordimiento. Antes no, lloviera, tronara o relampagueara, seguía con él hasta terminarlo. Pero si no lo estoy disfrutando ¿para qué sufrir digo yo?
un beso,
Ale.
Ale, gracias...qué bonito!! XX años!! Enhorabuena!!
EliminarJajaja...si...creelo mi madre ha enterrado mis libros. Según ella, por falta de espacio. Ya lo contaré porque están literalmente enterrados.
De mi niñez hubo pocos libros, más bien eran cuentos...y tampoco me arrepiento de ninguno. Pero, en la adolescencia, hubo algunos libros que reconozco que me averguenza admitir que llenaron las horas de mi vida. Pilcher no es mi mayor inconfesable. Quizá, hubo alguno de ésta autora que podía haber abandonado...pero no era capaz...como bien dices, aunque tronara y fuera muy aburrido, tenía que terminar de leerlo.
Hoy en día es diferente...
Me alegra saber que tus padres guardan tus libros...los míos lo hacen de otra manera...
Un beso grande!!
Ay María como disfruto tus entradas, siempre me hacen reflexionar :) No te puedes imaginar la pena que tengo de haber dejado en casa de mis padres muchos de mis libros de niñez. Ahora que vivo en un piso tan pequeño es imposible traérmelos todos conmigo; serían ellos o yo :)
ResponderEliminarLa verdad es que no lamento ninguno de los libros que he leído, lo que si lamento es haber descubierto algunos tan tarde! De todos modos esas lecturas me guiaron hacia lo que hoy leo y disfruto, así que bienvenidos sean todos, hasta Crepúsculo y otras novelas románticas :)
Es increíble las casualidades...tengo preparada una entrada sobre Rosamunde Pilcher para el día de la madre. Sus novelas son un lazo entre nosotras y solo me traen buenos recuerdos de lecturas compartidas entre madre e hija.
Un abrazo grande María.
Marie, yo también disfruto mucho leyéndote...gracias por tus palabras.
EliminarHe vivido en varias casas...algunas pequeñas o con distribuciones peculiares...es más especial entonces saber cómo colocar los libros. La imaginación crece...porque algunos son imprescindibles y te persiguen hasta casa a pesar de que no quede mucho espacio.
Yo sí que lamento algún libro que he leído...pero más que nada por el tiempo que siento que perdí con él. Éstos son los menos...y forman parte del pasado. Ahora trato de disfrutar leyendo.
No he caido en Crepúsculo...y me encanta ese lazo de unión madre e hija con Pilcher. Espero poder leerte pronto!!
Un beso grande!!
Todas esas novelas de corte romance-aristocrático también formaron parte de mi vida.Las hay de más o menos nivel literario, aún así,siguen trayéndome buenos recuerdos.Sonrío cuando las veo ahí en la estantería.De algunas incluso no me podía separar ni yendo a clase,ni aunque las hubiera terminado.Siempre me acompañaban.
ResponderEliminarBuen post.:).
Consuelo, también yo sonrio con algunas de ellas,...vistas desde una mirada prudencial, fueron lecturas agradables.
EliminarGracias por tus palabras
Hay libros que recordamos haber leído pero somos incapaces de dar el nombre de sus protagonistas o dar detalles sobre su argumento,otros sin embargo los recordamos con todos sus detalles.
ResponderEliminarCreo que todos los libros que leemos nos aportan algo y nos hacen ser lo que somos y también es cierto que los gustos lectores van cambiando con la edad
No he leído esos libros de los que hablas y la verdad es que los títulos son sugerentes...
Un Beso
Princesa Nadie...seguramente la mayoría de los libros despiertan algo en nosotros...pero unos pocos, los menos...no es que me hayan proporcionado demasiada satisfacción leyendolos...
EliminarNo todo lo que se lee nos aporta algo...
Y es curioso...como hay libros que a pesar de que han formado parte de nuestra adolescencia...hoy en día, nos siguen pareciendo maravillosos...
Hola María, nunca había oído de Nieve en Abril, pero de mi planta de naranja lima si, creo que nunca había llorado tanto leyendo un libro.
ResponderEliminarTe diré que he leído varias novelitas de Corin Tellado, ese sería mi pasado inconfesable jeje.
Pero no me arrepiento, me entretuvo bastante.
Pero si hay algunos libros que no es que me arrepienta de haberlas leído, pero que me dejaron muy mal sabor de boca, ejemplos: el valle de las muñecas y alguno que otro cuento de Guy de Maupassant.
Yo que tu voy a la casa de mi mamá a desenterrar mis cosas ah :D
Besos!!
Pilar...que bien descubrir libros que nos aportan tantos momentos diferentes, verdad??
EliminarEntre mis inconfesables hay alguno parecido a Corin Tellado...y la verdad es que era porque no tenía otra cosa que leer...pero no me encantaba...
Mi planta de naranja lima es maravilloso...
Un beso grande!!
Pues intercambio de pecados: yo leía novelas de Victoria Holt, jajaja! Besos
ResponderEliminarUps!! Yo también...jajaja!! Pero no lo considero inconfesable...Bss!!
EliminarConfieso sin arrepentimiento que también he leído a Rosamunde Pilcher y disfruté con ella hace años.
ResponderEliminarBuena semana!!
Me alegro!! Yo de alguno de ella...sí que me arrepiento...de otros no.
EliminarUn beso grande y buena semana para ti también!!!
Una de las cosas de las que más me arrepiento es de todos los libros de infancia que me tuve que deshacer con la mudanza. Sé que están perdidos y no volverán jamás, muchos de ellos ni se encuentran ahora. No recuerdo lecturas de las que me arrepienta ahora, quizá alguna que otra pero no hay muchas, en parte porque de adolescente me dio una época muy snob y solo leía a los autores que venían muy recomendados.
ResponderEliminarA mi no me atrae nada Mi planta de naranja-lima y eso que me lo han recomendado muchas veces. Me da mucha pereza y eso que he leído varios libros brasileños y he visto algunas películas y series... además de anglofila soy bastante exótica. Y mira, a Pilcher, me la quiero leer ahora ;)
Besitos y dile a tu madre de mi parte que te devuelva esos libros :)
LittleEmily,...las mudanzas a veces son terribles...otras sirven para poner en orden lo que tienes y en otras ocasiones, para descubrir tesoros ocultos...lo peor es cuando se pierde algo muy querido...en fin...
EliminarLos libros inconfesables suelen durar poco en nuestra memoria...pero, quién sabe...lo mismo todos los libros te aportaron algo. Porque no me refiero a esos libros que no te llevaron a otros, ni que en su momento fueran lecturas estupendas...sino a esos que una dice...¡¡pero que hago leyendo estos libros!!
Me encanta ese lado exótico que tienes, y sé que no solo lees libros so british...también hay lecturas de otros países y mundos con los que podemos viajar...
Pilcher es...para el verano, para el otoño, para las tazas de té...y sabes que estarás en Escocia o en Cornualles...en una casita tipo Costwolds.
Bueno, que tengas un precioso día...y hablaré con mi madre...pero más que nada tengo que encontrar tiempo para ir a desenterrar libros, jejeje.
Un besin gigante, y espero tener en estos días un rato grande para devorar tu blog. Gracias por pasarte.
Ay María, pues a mí Rosamunde Pilcher me encanta y me encantará siempre, que siento a algunos de sus personajes como amigos de toda la vida. Nieve en abril aún no lo he leído, pero caerá, lo mismo que Septiembre...
ResponderEliminarEn fin, que es bonito recordar lecturas a las que guardamos cariño :)
Isi, contigo recordé que hay mucho de bueno en esos libros que ahora no leo...y desde luego, Septiembre tuvo algo especial... como que es un inconfesable-confesable...Además...fue llevado al cine con Jacqueline Bisset.
EliminarPero reconozco que algunos de ellos me parecen lecturas inconfesables.
Un besin!!
Como ya te han comentado, todos tenemos libros que nos avergüenzan ahora pero que, en su momento, fomentaron nuestro interés por la lectura. Como cinéfila empedernida, también me ocurre con muchas películas que en su momento creí maravillosas y ahora... no tanto.
ResponderEliminarEn cuanto a "Mi planta de naranja lima"... A mi también me lo mandaron a leer en el instituto, pero yo lo acabé odiando...
Bisous!
Cicely, jajaja...cierto. Reconozco que Dity Dancing fue mi película de adolescente, pero pasados unos años, empecé a verla con otros ojos...
EliminarSiento que Mi planta de naranja lima no te gustara...pero para eso están los libros, para encontrarnos con ellos y ver qué pasa...
Bisous para ti también!!
Pues puestos a confesar, leí y releí a Stephen King con deleite. Todo, todito lo que había publicado hasta hace doce años o asi. Algunos varias veces. De hecho el primer regalo que mi ahora esposa me hizo cuando empezamos el noviazgo fue una novela de Stephen King (la mejor que le leí, por cierto, era "It"). Ahora no es que reniegue de esas lecturas, aunque creo que no las retomaría aunque (literalmente) no hubiera nada más que leer en la Tierra. Pero bueno, estoy convencido de que contribuyeron a mi formación como lector. O eso quiero pensar. Entonces devoraba libros de manera omnívora, sin criterio o filtro. Leía a Alberto Vazquez Figueroa, Sven Hassel o Frederick Forsyth, a los cuales tampoco releería. Pero era lo que tenía mi padre en casa.
ResponderEliminarAsi que, efectivamente, todos tenemos un pasado. También un pasado lector.
Saludos.
Stephen King, no lo he leído pero hace poco una amiga nos regaló "Los ojos del Dragón"...Buscaré It.
EliminarYo también creo que los inconfesables no volverán, pero no sé que diré dentro de unos años...viendo a mis padres las lecturas que eligen a veces...creo que todo es posible, y nunca se sabe qué será de nuestra imaginación y de nuestras lecturas del futuro. Reconozco que los más inconfesables no los que contado...pero es que no recuerdo ni los títulos...
Todos tenemos un pasado, algunos nos llevaron a otros libros, y otros llenaron nuestras horas...
Lo mejor es ahora leer lo que sentirmos que está en total concordancia con nosotros mismos...
Un saludo!!
Yo no puedo con Rosamunde Pilcher. Lo intenté con uno que se llamaba Los noséqué de conchas (o algo así, ejem) y no pude y encima le cogí tirria a ella. Pero todo el mundo - y quien lo niegue estoy segura de que miente - tiene sus lecturas "culpables". Yo a principios de la década de los años 2000 tuve un verano de lecturas chicklit mortal (eso me parece ahora, pero en su momento bien que lo disfruté)... y me quedó un punto débil con Marian Keyes (aunque hace siglos que no leo nada suyo). Pero bueno, lo importante es leer, ¿no?
ResponderEliminarOh, bueno, y también mucho Dan Brown. Oops.
Cristina, jajaja...me ha gustado mucho eso de "yo no puedo con..." y tu "Oops". Algunas de esas lecturas inconfesables hoy, nos hicieron pasar buenos ratos...e incluso nos llevaron a otros libros, pero hay lecturas que aún me pregunto a dónde me llevaron porque no las veo el sentido.
EliminarMarian Keyes no la conozco, pero bueno...tal vez también tenía su punto, aunque ahora no volverias a ellas...Con Dan Brown no pude y lo intenté.
Besos!!
Recuerdo ese libro "Nieve en Abril", apenas el argumento, pero si me gustó y tampoco soy especialemnte amante de Pilcher,...pero bueno, hay momento y momentos, y nunca sabes, si al abrir un libro, te encantará inesperadamente.
ResponderEliminarFelices lecturas!
Nuria Carreras, bienvenida!! La verdad es que no recuerdo mucho más que el título de ese libro y algo del argumento...pero no recuerdo ya la sensación que me dejó. Suponto que a ratos muy buena, ya que me llevaba a Cornualles y a Escocia.
EliminarPero, hoy en día, el argumento y estilo de narración no me atraen tanto como entonces.
Felices lecturas para ti también y gracias por venir por aquí!!