Encuentros en Oxford
"Estábamos hablando de dragones, Tolkien y yo.
En un bar deBerkshire. El enorme barman que había estado la tarde sentado y fumando su pipa toda la tarde mirándonos, con el vaso vacío, con brillo en los ojos, mirándonos de reojo, dijo con rabia: yo también los he visto".
"No hay una hora fija los jueves por la tarde para que se reunan los Inklings, pero suelen aparecer entre las nueve y las diez y media"
Textos recogidos del libro: Los Inklings. Humphrey Carpenter
Bueno, pues allí estuve, a la espera de reunirme con los Inklings y charlar un rato con ellos sobre libros...quizá tuviera suerte y me leyeran en alto algo sobre el Hobbitt...un poema, un pensamiento...quién sabe...
Pero en su lugar, tuve la inmensa suerte de encontrarme con una Señorita que suele visitar el Lapin muy amenudo,....que normalmente está sentada en un rincón...y que se reune con escritores que siempre resultan ser muy interesantes...
En esta ocasión había cambiado el Lapin por el Eagle and Child y fue un encuentro muy especial. Allí estuvimos un rato hablando y creo que nos habríamos quedado mucho más. Saboreando un Earl Grey con leche...(dejando el limón para los ingleses). Conocerse es importante, por eso las mujeres y hombres que rodean nuestras estanterías, tendrían mejor momento...
Y cómo no...hubo visitas a Blackwell y a Waterstone y a otras muchas librerías. Pasear por Oxford, es como atravesar el mundo de las palabras. Siempre pienso en las miles de esas palabras que habitan dentro de las mentes de los transeúntes...algunos estudiantes, otros profesores...otros simplemente visitantes...
Me incorporé a las calles de Oxford dando un rodeo por los canales. Allí, parece existir un Amsterdam silencioso y escondido...los barcos tienen buzones en sus estrechas casas y son a cual más curioso. Fue un paseo muy agradable...
Y sin saber muy bien donde estaba, aparecí en unas calles que no había visto nunca de Oxford...y en ellas me encontré con una librería poco habitual. Es una librería de segunda mano que posee grandes libros del que tenía que apartar la vista, porque no habrían cabido en la maleta..., pero a pesar de mi resistencia, me decidí por uno; uno editado en el año 39 y que fue regalado en el 40. Tuvo dueña...y su nombre aparecía en la primera pagina. Me llevé un "Orgullo y Prejuicio" leído seguramente en la 2WW, y por solo 3 Libras.
En esta librería puedes degustar de un té, o un café...el dueño, parece un visitante más y a veces resulta inadvertido.
Salí de lo más contenta...y como era la hora de comer...pasé a tomar algo en un pub llamado Jude El Oscuro. Pensé que Thomas Hardy estaría dentro, escribiendo algún relato...pero no fue así...Sólo tomaron el nombre de su obra. Pero Dickens si reposaba en sus estanterías...y algún otro libro que podías tomar prestado mientras comías.
Estoy contando bastante mal este paseo por Oxford, y es que he comenzado por el final...y estoy terminado casi con el principio. Esta vez tuve menos tiempo, pero eso no evitó dar un paseo por los edificios antiguos...por sus calles empedradas...
Aún quedan muchos lugares que disfrutar en Oxford...tengo ganas de ver la casa de Lewis,...entrar en algún otro pub menos transitado...o volver a pasear por entre los árboles de Magdalen...
También me habría encantado...tropezarme tras el "puente de los suspiros", a Barbara Pym con su bicicleta y los libros que estuviera leyendo...o pasar a la casa de Dorothy L.Sayers y saborear un poco de su té, mientras me cuenta algún misterio sin resolver...También me habría encantado pasear de la mano de Jane Austen y acercarme a los rincones del Oxford que ella conoció.
Todos esos viajes que aún no he hecho, quedan pendiente para próximas visitas. Mientras, leer a quienes vivieron allí, me hará sentir de nuevo estar caminando por sus calles...
Una vez casa, después de un viaje inesperado, como toda buena hobbitt, me quedo saboreando el momento del viaje...acudiendo a los libros que siguen llevándome allí...y a otros lugares quizá menos conocidos.
Ahora leo menos, pero tengo muchos libros de los que hablaros que ya leí... Espero encontrar el momento de volver a sentarme con asiduidad para escribir y leeros...
Fotos: extraidas de la cámara que nos acompaña en los viajes...
En un bar deBerkshire. El enorme barman que había estado la tarde sentado y fumando su pipa toda la tarde mirándonos, con el vaso vacío, con brillo en los ojos, mirándonos de reojo, dijo con rabia: yo también los he visto".
"No hay una hora fija los jueves por la tarde para que se reunan los Inklings, pero suelen aparecer entre las nueve y las diez y media"
Textos recogidos del libro: Los Inklings. Humphrey Carpenter
Bueno, pues allí estuve, a la espera de reunirme con los Inklings y charlar un rato con ellos sobre libros...quizá tuviera suerte y me leyeran en alto algo sobre el Hobbitt...un poema, un pensamiento...quién sabe...
Pero en su lugar, tuve la inmensa suerte de encontrarme con una Señorita que suele visitar el Lapin muy amenudo,....que normalmente está sentada en un rincón...y que se reune con escritores que siempre resultan ser muy interesantes...
En esta ocasión había cambiado el Lapin por el Eagle and Child y fue un encuentro muy especial. Allí estuvimos un rato hablando y creo que nos habríamos quedado mucho más. Saboreando un Earl Grey con leche...(dejando el limón para los ingleses). Conocerse es importante, por eso las mujeres y hombres que rodean nuestras estanterías, tendrían mejor momento...
Y cómo no...hubo visitas a Blackwell y a Waterstone y a otras muchas librerías. Pasear por Oxford, es como atravesar el mundo de las palabras. Siempre pienso en las miles de esas palabras que habitan dentro de las mentes de los transeúntes...algunos estudiantes, otros profesores...otros simplemente visitantes...
Me incorporé a las calles de Oxford dando un rodeo por los canales. Allí, parece existir un Amsterdam silencioso y escondido...los barcos tienen buzones en sus estrechas casas y son a cual más curioso. Fue un paseo muy agradable...
Y sin saber muy bien donde estaba, aparecí en unas calles que no había visto nunca de Oxford...y en ellas me encontré con una librería poco habitual. Es una librería de segunda mano que posee grandes libros del que tenía que apartar la vista, porque no habrían cabido en la maleta..., pero a pesar de mi resistencia, me decidí por uno; uno editado en el año 39 y que fue regalado en el 40. Tuvo dueña...y su nombre aparecía en la primera pagina. Me llevé un "Orgullo y Prejuicio" leído seguramente en la 2WW, y por solo 3 Libras.
En esta librería puedes degustar de un té, o un café...el dueño, parece un visitante más y a veces resulta inadvertido.
Salí de lo más contenta...y como era la hora de comer...pasé a tomar algo en un pub llamado Jude El Oscuro. Pensé que Thomas Hardy estaría dentro, escribiendo algún relato...pero no fue así...Sólo tomaron el nombre de su obra. Pero Dickens si reposaba en sus estanterías...y algún otro libro que podías tomar prestado mientras comías.
Estoy contando bastante mal este paseo por Oxford, y es que he comenzado por el final...y estoy terminado casi con el principio. Esta vez tuve menos tiempo, pero eso no evitó dar un paseo por los edificios antiguos...por sus calles empedradas...
Aún quedan muchos lugares que disfrutar en Oxford...tengo ganas de ver la casa de Lewis,...entrar en algún otro pub menos transitado...o volver a pasear por entre los árboles de Magdalen...
También me habría encantado...tropezarme tras el "puente de los suspiros", a Barbara Pym con su bicicleta y los libros que estuviera leyendo...o pasar a la casa de Dorothy L.Sayers y saborear un poco de su té, mientras me cuenta algún misterio sin resolver...También me habría encantado pasear de la mano de Jane Austen y acercarme a los rincones del Oxford que ella conoció.
Todos esos viajes que aún no he hecho, quedan pendiente para próximas visitas. Mientras, leer a quienes vivieron allí, me hará sentir de nuevo estar caminando por sus calles...
Una vez casa, después de un viaje inesperado, como toda buena hobbitt, me quedo saboreando el momento del viaje...acudiendo a los libros que siguen llevándome allí...y a otros lugares quizá menos conocidos.
Ahora leo menos, pero tengo muchos libros de los que hablaros que ya leí... Espero encontrar el momento de volver a sentarme con asiduidad para escribir y leeros...
Fotos: extraidas de la cámara que nos acompaña en los viajes...
Qué maravillosa escapada!! El comienzo me ha dejado sin palabras, porque me encanta Tolkien y su mundo (no sólo el inventado, sino también el que vivió con sus amigos) ha sido fantástico este paseo inesperado. Espero que puedas volver pronto para conocer esos lugares pendientes y mientras tanto sigas disfrutando de la lectura y de la vivencia interior.
ResponderEliminarAbrazos.
Muchas gracias Thornton,...fue un viaje inolvidable, pero sigo con la mochila preparada para volver y visitar aquello que queda pendiente...y repetir aquellos otros que guardan un especial significado...
EliminarUn saludo, Trancos!!
Es otra de estas visitas que quiero volver a hacer. Solo he estado una vez en Oxford y por supuesto me supo a poco. Me quedan tantas cosas por descubrir, hay tantas cosas interesantes. Sigo apuntando los sitios que nos enseñas para mis próximos viajes.
ResponderEliminarUn saludo.
Mariuca, esta entrada dice poco de los lugares que he visitado. Pero tengo otras sobre Oxford que dicen más...lugares que a mí me habría gustado saber antes de ir...aunque también es precioso descubrirlos por ti misma.
EliminarUn saludo y que disfrutes pensando en los próximos viajes.
Qué ganas de visitar Oxford! (bueno, todo Reino Unido, en realidad!). Adoro que cada rincón esté relacionado con la literatura y que por sus calles pasearan tantos autores... Qué maravilla de viaje, me apunto muchos sitios... Y qué joya te llevaste con el OyP de 3 libras, me encanta que los libros de segunda mano tengan notas en los márgenes o dedicatorias, los dota de algo, no sé, especial :)
ResponderEliminarDisfruta de los días de manta y libro que están por llegar :)
Un besito!
Lucy...pues nada...cuestión de prioridades y en cuanto se pueda, llenar la mochila de casi nada, porque luego la traerás llena de mucho...y no solo de lo que pesa, también de ideas, sueños,...en fin...todo lo que se despierta en una cuando hace un viaje.
EliminarEl libro fue un encuentro muy interesante, pero me habría llevado muchos más.
Intentaré disfrutar de la mantita...aunque creo que me quedaré haciendo otras cosas que tengo pendiente.
Un abrazo!!
María, muchas gracias por este paseo por Oxford, siempre es un placer leerte e imaginarme por esas calles.
ResponderEliminarUn abrazo.
Para mí también es un placer leerte a ti...veo que estáis publicando muchas entradas...Y quiero leerlas todas con tranquilidad. Buscando el momento idóneo.
EliminarUn abrazo grande y espero que algún día también tú disfrutes nuevamente de los paseos por Oxford.
¡Qué envidia sana me das!
ResponderEliminarGracias por compartir con nosotros esas vivencias ,me haces sentir que yo también he estado ahí
Muchos Besos
Princesa Nadie...me alegro muchísimo...de algún modo, estuviste...porque os llevo.
EliminarUn abrazo!!
Si sentías una envidia que te perseguía en el recorrido de esos rincones llenos de grandes artistas, era la mía, que muere por conocer esos lugares algún día.
ResponderEliminarBesos
Luciana, siempre vienes a estos viajes conmigo, pero deseo de todo corazón que algún día puedas atravesar el océano y conocer por ti misma esas calles , donde los escritores que tanto admiramos solían transitar.
EliminarUn beso grande!!
Una de las ciudades auténticamente mágicas de Europa. Disfruté como un loco allí. Y para fanáticos de la literatura es lugar de peregrinación sagrado.
ResponderEliminarTu entrada me trae muy buenos recuerdos.
Gracias
Oscar, me alegro. La verdad es que aún recuerdo una entrada que hiciste en la que decías que salias a correr por las calles de Oxford. Tiene que ser genial, correr y después salir a buscar libros...esos que nos gustan tanto y que leermos sin cesar.
EliminarMientras tú acababas de contarnos tus paseos por Londres y Oxford yo paseaba la capital, María, en este otoño precioso y en una visita que ha sido especial por muchas cosas, la familia, el viaje...
ResponderEliminarCómo no, me acerqué a mi tienda habitual para traerme al sur una buena provisión de té. Par mí no innové mucho, un breakfast al que poder añadir hierbabuena, mi indispensable earl grey crema y el toffe para los momentos más golosos. Sí me animé, en cambio, a probar novedades para mi hermana y, por recomendación, le traje el bom banana y el gracia blend rojo (para reafirmarme, después de probarlo, en que no me gusta el té rojo). Como siempre que voy a por té me acordé de ti y esta mañana, el preparar mi earl grey, que hacía tiempo se me había terminado, levanté mi taza a tu salud.
Y después de leer tus dos últimas entradas mi cuadernito empieza a estar un poco saturado, ¿cómo voy a elegir entre tanto y tan bonito? Tendré que hacer una selección.
No me perderé, por supuesto, el 21B de Baker Street. ¿Ya te he contado que fue, precisamente, leyendo las novelas de Sherlock Holmes cuando empecé a enamorarme de Inglaterra? Tenía 9 años y, ya ves, ese amor no pasó con los años.
Me ha encantado tu paseo por el cementerio, ¿cómo gore? Son siempre visitas mágicas.
Y ese jardín escondido... ¡tampoco me lo puedo perder!
De Oxford, ¿qué te voy a contar? Sé que tendré tanto que ver que no podré hacerlo en un ratito.
Pero hoy, de nuevo, me has permitido conocer un poco más y, como siempre, me ha encantado este paseo. Mil gracias.
Espero que estés disfrutando del otoño, tan romántico, de tés, mantitas y libros. Fíjate, mi casa nueva es un poco fría y este año yo también he empezado un poco antes a refugiarme bajo las mantas agarrada a mi taza caliente.
Un abrazo grande, María. Como siempre, ha sido un placer venir a pasear contigo.
Matilda, que ilusión leerte. Me alegra saber que has estado en la ciudad, paseando por Madrid y abasteciendote de té...de ese que nos gusta tanto y a veces la cocina huele todo a él.
EliminarMi intención es ir esta tarde a comprar,...apenas tengo ya existencias.
Pero mi viaje a Inglaterra ha sido a finales del mes de Septiembre, aunque lo haya escrito y recordado ahora.
El jardín escondido es imprescindible...mi compañero de viaje, me hizo un regalo maravilloso encontrándomelo.
Baker Street te espera...y ese número 221B...un número inexistente, tan solo existe para los que hemos leído algo de esos libros...escritos por la imaginación de alguien.
Espero que estés allí algún día...visitando esa casa.
Mi casa también es nueva para mí, a pesar de que lleve casí un año viviendo en ella...y es fría. Tal vez este año consiga sentir más calorcito.
Y confio en que hagas algún día tu viaje a Inglaterra...algún día la encontrás y te verás a ti misma dentro de las librerías de allí...y te sentirás tal vez, como en un cuento.
Últimamente entre el trabajo y más proyectos en los que me he metido, no tengo mucho tiempo para manta y té...pero los pocos que hay...los disfruto todo lo que puedo.
Otro abrazo grande Matilda, y espero que sigas tomando muchos tés...¿probaste el té de Navidad?
Un beso!!
Oooh! Me encantaría visitar Oxford! Aunque ya me has hecho conocerlo un poco. Gracias y besos
ResponderEliminarLa verdad es que pasee con quienes soléis venir por aquí. Un abrazo grande!!
EliminarHola María!
ResponderEliminarGracias por esta entrada! Cada vez que la leo (parezco una obsesa jaja), parece que volvemos a estar allí sentadas en el Eagle and Child, con esa luz tan especial que tiene.
Me has dibujado una sonrisa enorme!
La librería de segunda mano de la que hablas, se llama Cafe books? Es que no la conozco y me encantaría visitarla a ver si me puedo beneficiar de alguna joyita como la que tú te has llevado a España.
Un besazo enorme! Mil gracias por la entrada, por nuestra cita y por ser tan especial.
MªJosé, está entrada la escribí muy deprisa y muy mal....las vivencias, al contrario, fueron maravillosos. De algún modo seguimos allí, sin que el té se haya amargado...y sin limón, of course.
EliminarSi la la librería es Café Books, pero creo que tiene otro nombre...lo busco y te lo envio.
Allí hay joyas que estoy convencida de que te estarán esperando.
Un beso grande, mi querida Señorita del Lapin.
Hay una novela de Javier Marías, TODAS LAS ALMAS, ambientada en Oxford y desde que la leí quiero visitar esta ciudad universitaria. Al leer tu bella entrada me la ha recordado y he releído con gran placer las anotaciones que tengo de ella en una vieja, pero encantadora libreta, muy vintage, con un gatito en la portada. No sé si has leído esta novela, pero después de tu viaje creo que te gustaría mucho.
ResponderEliminarSería un placer conocer a esa señorita que se reúne con escritores. La imagino como una especie de Lou Von Salomé, el gran amor de Nietzsche y el poeta Rilke. Con un rostro bello e inteligente y un cerebro singular y extravagante. Yo tomaría con ella un té con leche.
Seguro que luce hermoso tu libro de ORGULLO Y PREJUICIO. Los tomos grandes son para leerlos en el suelo, en una estancia grande con enormes ventanales en un día de lluvia...
Al mirar mi vieja libreta por el libro de Marías, he recordado que de Hardy tenía también anotaciones: "Me arrodillé en la orilla y entreabrí la mano para beber el agua del arroyo, y una figura etérea apareció a mi lado contemplándome con la mirada de antaño". Verdad que es una preciosidad? No he leído demasiado a Hardy y no sé por qué, pues me parece un poeta que pondría ante mí un sinfín de imágenes, precisamente, de antaño que disfrutaría muchísimo.
Querida María, siempre disfruto con tus elegantes entradas y siempre me haces viajar entre mis libros y viejas libretas de anotaciones recordando bonitos momentos de lecturas cuando el tiempo se detenía y leía junto a mí. Gracias por tu buen gusto y por tu capacidad de hacernos evocar momentos hermosos. Un beso!!
La Minomalice, no he leído ese libro de Javier Marías, pero lo anoto de inmediato. Me gusta leer a quienes escriben donde han estado, y si es Inglaterra, mejor que mejor.
EliminarThomas Hardy, no he leído mucho de él, porque me deprime, pero escribe de maravilla...es un gran escritor...de eso no cabe duda...tal vez algún año, vuelva a aparecer por aquellas calles con Judd, el oscuro entre mis manos.
Gracias por todo lo que me dice, Minomalice,....mis entradas de elegantes tienen muy poco...y más ésta que la escribí deprisa y corriendo.
A mí me gusta más leerte a ti...mezclas arte, con palabras, libros y autores,...y siempre que salgo de tu rincón, me voy con una sonrisa de oreja a oreja...y con ganas de hacer más...de leer más...de escribir más...
Un beso grande y disfruta de esos proyectos que haces y que luego nos muestras...
Unas hermosas fotos, aunque, y no es por desmerecer tu talento haciéndolas, lo cierto es que el lugar es fotogénico a rabiar. Qué gustazo ha de ser recorrer sus calles, y cuánto lamento ahora que cuando yo estuve ahí siendo una adolescente no supiera admirarlo como se merecía. Espero que sigas haciéndonos soñar con más entradas de esta bella ciudad, de momento me dejas aquí imaginándome que estoy de nuevo paseando por esas calles y con el olor a Earl Grey nublándome los sentidos. Besos.
ResponderEliminarGracias Rebeca, por tus palabras...estoy convencida de que volverás...los viajes siempre son reencuentros...y también esa primera vez que fuiste, tiene sus momentos maravillosos. Mejor que no supieras todo lo que podías ver...tal vez viajaste más tranquila.
EliminarUn abrazo muy grande!! Mmmm lo del Earl Grey nublando sentidos me ha llegado al alma!!
Bss!!
María: he leído toda tu serie de Londres y debo agradecerte permitirme viajar contigo a través de ellas. Llego con retraso porque tengo el tiempo muy recortado, pero que sepas que te leo siempre.
ResponderEliminarUn beso,
Ale.
Ale, gracias...yo también dispongo de menos tiempo ahora. También te leo...y me gusta mucho lo que nos cuentas.
EliminarUn abrazo!!
María, no te imaginas lo mucho que me gustan tus viajes y tu forma de compartirlos en el blog. Es que es una maravilla leerte. Gracias.
ResponderEliminarCristina, viniendo de ti, una gran conocedora de Londres e Ingleterra, me alaga aún más. Qué tengas un buen día, y muy buenas lecturas!!
EliminarBss!!