Descubriendo a Karin Michaëlis

Qué luz tan bella hace hoy. Estoy tratando de tomar contacto con todo lo que me rodea...

Observando a los pájaros confundidos por este Febrero loco que ha empezado con viento y temperaturas altas. Desde mi ventana actual, desde donde escribo ahora, puedo ver a los mirlos danzar entre las hojas y recoger los pequeños brotes que van surgiendo de la tierra... 

Es tiempo de ver crecer...de ver nacer muy poco a poco, lo que estaba dormido.

Tenía pensando escribir sobre un libro terminado el pasado mes, pero el día de hoy tenía otros planes...

Hoy esta siendo un día de "recogida de paquetes". Además de los habituales: el cartero y el panadero...han llegado dos libros antiguos a casa.

Uno de ellos es Bibi, de Karin Michaëlis, escritora danesa bastante desconocida y muy interesante...Y el otro sobre Flores Prensadas, de Mary Lawrence (libro de los noventa u ochenta...algo antiguo). 

El libro de Bibi, lo encontré casualmente. Porque estaba buscando más información sobre Karin Michaëlis, y su libro de la "Edad Peligrosa" que reseñé allá por el 2008 y que me parece un libro maravilloso para que estuviera en varias bibliotecas y siguiera siendo leído. 

La Edad Peligrosa es una pequeña historia, o novela, o relato,...de una mujer que ya ha pasado los cuarenta y vive el climaterio. Si...el climaterio...¿conocíais la palabra? -  Para mí era totalmente desconocida...y es muy interesante... Tiene que ver con cómo se sienten las mujeres antes, durante y después de sufrir la menopausia. Es muy curioso porque de esto apenas se habla. Vivimos en un mundo donde parece que se habla de todo, pero sigue habiendo tabúes, solo que estos cambian dependiendo del momento. La menopausia sigue siendo un tema poco interesante. De hecho, este libro, que está tan bien escrito y que es en cierto pionero en hablar de todo esto de otra forma a la esperada, esta actualmente descatalogado y si se encuentra es con unos precios desorbitatantes. 

Se trata de la edad prohibida de una mujer...como si no pudiéramos disponer de ese tiempo extraño y raro...El libro trata de rescatar a  una mujer que se divorcia de su marido después de veinte años. Es una mujer con gran poder adquisitivo, que puede construirse una casa por sus propios medios, en medio del bosque. Y en este caso, para mayor simbología; en una isla. ¿Por qué? ¿Para qué? Para estar consigo misma. Estamos en 1910 y aún las Grandes Guerras no han tenido lugar...Y quiere escapar quizá...tal vez...eso está por descubrir de sí misma...o de la que era antes, para conocerse de nuevo ahora. El libro es rápido, con sentido del humor, y a medias entre epistolar y diario (sin fechas). Muy adelantado a aquellos años...

Es un libro del que, dicen, fue protagonista de varias ponencias médicas en la época, ya que se hablaba y se mostraba a una mujer en una edad diferente. Que esta en pleno apogeo de cambios internos, y que estos cambios, evidentemente, se traducirán en una exposición de síntomas externos. 

De esto ya hable en esa entrada de hace años...ahora me interesaba la vida de la autora, y tratar de rescatarla del anonimato y de mi propio olvido. Y descubrí que este libro, fue tan importante en su vida, que transformó parte de ella...y me habría gustado leer...qué habría pasado con esa mujer (Elsie Lindtner) en la Edad Peligrosa, haya decidido dar riendas a su imaginación y parar...detenerse...para conocer qué le está pasando...La suerte de nuestra protagonista es que cuenta con una buena cuenta bancaria y una casa en la que cobijarse sin depender de nadie más.  

El libro muestra que lo que creemos que queremos a veces no es, y sin embargo lo fue,  nos sirve para romper algo y hacer nacer otro momento espectacular en nuestra vida. Además de ofrecernos la oportunidad de seguir siendo peligrosas a una edad en la que parecía que no interesábamos nada. 

Michaëlis, publicó muchos libros que no están traducidos a nuestro idioma, sin embargo, Bibi, una historia juvenil, si lo está. aunque la edición que hoy me ha traído el repartidor es de 1934 y sus páginas huelen a tiempo...a un tiempo en el que aún no se ha llegado a escalar el Everest y a una niña que quizá fue precursora de nuestra conocida y traviesa Pipi...Por lo poco que sé, Bibi es una niña que no tiene madre, pero sí padre. Y éste trabaja como oficinista del tren. Ella tiene una visión peculiar del mundo y aprende de él de una forma distinta y muy dinámica. Le gusta viajar, y de cuando en cuando su padre le regala billetes de tren. Su vida es más independiente que la de otros niños y ella sabe sacarle jugo a esa experiencia. También, como digo, tiene la suerte de ser muy resuelta y disponer de pensamientos propios. Confía en sus animales de compañía, y por qué no, los lleva al colegio si cree que es conveniente. Tiene una forma de pensar diferente. Aún no he leído el libro...solo unas primeras hojas, y ya he contado todo esto...en fin...

Es curioso, porque mis lecturas actuales son de mujeres que viven quizá en esa Edad Peligrosa...en esos mismos años que describe la autora, y son mujeres que están llevando a cabo tareas de la vida invisibles y necesarias. Me gusta coger estos libros, envolverme en mi manta y con una rica taza de té humeante saborear los miles de momentos cotidianos con los que siento que me identifican. A veces esos momentos me llevan a saborear vivencias del pasado, con olor a leña y a pan recién hecho...pero también a mirar con esperanza el futuro rescatando lo que no quiero dejar de tener tiempo para hacer...es decir...disfrutar de aquello que se hacía antes y que ahora rememoro. Para dar y compartir, y para disfrutar y saborear...

Ahora, con menos tiempo para todo esto, me dedico a pensar que la belleza de este mundo reside en esos instantes que hemos querido ir tapando como importante y de nuevo, a través de técnicas como el mindfulness u otras, volver a ser conscientes de lo que comemos, a tomarnos nuestro tiempo con lo pequeño, porque si no, estamos tan ausentes de nosotros mismos que eso nos pasará factura...

A mí aún me quedan, creo, algún tiempo para la temida o impronunciable Edad Prohibida...Sin embargo, dado que si tengo que quedarme aquí, será por algo, confío en encontrar aceptación para cuando toque vivir ese tiempo.  Aprender a conocer cómo somos con esos cambios y ese nuevo estado de la vida. Supongo que hay que volver a escucharse y a escucharnos...nuestro interior habla o hablará...y además, nos permitirá conectar aún mejor con todo lo que nos rodea. 

Mis libros ahora son muy diversos,...pero tengo pendiente, muy pendiente hablar de Peregrina...me gustó mucho y espero no olvidar lo que aprendí leyéndolo. Pero eso será para otra ocasión. Hoy tenía la necesidad de escribir, y de contar ese "nada" que nos sucede y que llena nuestra vida y la da sentido y color...